«PACMAN BUSCA PISO». ceras y acrílicos sobre lienzo, 100 X 73 cms. cuadro realizado en concierto de SOLARIS JAZZ TRASH en el GARAZI (Iruñea). retocado con Adobe Photoshop para evitar los destellos del flash.
Lejos de considerar a los bares cómo lugares dónde la gente va a evadirse, pienso en ellos cómo lugares de encuentro…dónde suceden conexiones que nos hacen más humanos.
El Garazi de Iruñea es uno de ellos. Veintiocho años caldeando Calderería son testimonio de ello. Quizás sea el Tiempo el que pone a las cosas en su sitio, pero pienso que también tiene mucho que ver el hacer de las personas; y a menudo, el dejar hacer de las mismas.
Estuvimos cenando antes del concierto compartiendo mesa con su gestora, Marisa; y nos hablaba un poco de la historia de este espacio, el GARAZI, de muchos de los grupos que se han encontrado ahí y cómo ha ido sorteando los obstáculos a lo largo de su trayectoria…todos sabemos que la calle Calderería de Iruñea es un poco la marginada del Casco Viejo, con mucho «tráfico» permitido…y no de coches. Quizás a la autoridad le asusten los lugares dónde la gente se encuentra de tú a tú…
Gracias por todo.
Muchas veces pienso que más que ofrecer unas notas musicales y unos cuantos colores o unos «pintxos» que pueden variar de un concierto a otro, nuestro trabajo consiste en compartir aquello «que nos da la vida» (Alexei Bolotov): la música, la pintura o la gestión de un lugar de encuentro…creo que cuando cada uno halla su «solución estética personal» (Jorge Oteiza) entendida por la razón por la que una persona quiere vivir y morir, es cuando más permite «dejar hacer» y creo que es cuando actúa con mayor Libertad…
Siento que cada vez me dejo llevar más por la música de mis compañeros Juanma y Tio Rod. Lo sentí en este concierto. No perseguía tanto un resultado y aplicaba el color intentando atrapar las notas musicales, los ritmos…me dejaba llevar, quizás cada vez con más confianza…
Este cuadro ha sido el primero que he firmado como «cabra«. Es una larga historia, pero básicamente la razón es que no solamente lo pinto yo, cómo podría hacerlo en el Taller; sino que muy explicitamente estoy influenciado por el ambiente que me rodea, el público…y sobre todo por la música.
Y desde el concierto anterior en La Hormiga Atómica, cuando Eneko puso el titulo al cuadro que le tocó; en esta ocasión el titulo también se lo puso su dueño, Asier: «PACMAN BUSCA PISO«.
Gracias a Maria Ihaben y a Cristina por vender los boletos y por el reportaje gráfico. Y al público, por hacer posible este lugar de encuentro.
el arte como herramienta 
chevere