«QUIMERA». acrílicos, maderas , spray y papel de periódico sobre muro de piedra. mural realizado en el Estudio-Taller de Tio Rod (la Rodriguera), Murieta-Navarra. 2013-14.
Durante todo este año pasado y principios de 2014, en diferentes sesiones distantes entre sí, he ido pintando este mural en el Laboratorio de Tío Rod. Muestro aquí el resultado y algunas imágenes de su proceso.
Desde un principio me supuso un reto el poder pintar sobre una superficie totalmente anárquica como es un muro de piedra y en un espacio que ya de por sí está cargado de un ambiente mágico, muy personal, quizás por ello sensual…es cómo una cueva cálida, un lugar de reunión y creación, de camaradería. Un espacio dónde el Tiempo se puede detener.
Hay que subir las escaleras para descubrirlo.
En su proceso descubrí el PINTAR POR PINTAR, gracias sobre todo a la superficie del muro. Comencé disfrutando de la pintura,dejándome llevar por los colores y las piedras, por las vigas de madera…llegué a sentirme un artista pintando en la pared de una cueva, cazando el instante, bailando junto a las notas que salían del saxofón de Tío Rod. Un ambiente muy envolvente, la oscuridad, la candela de la estufa, la música…muy básico y primitivo.
Difícil en tiempos de muchas capas.
Después de varias sesiones descubrí un DRAGÓN en la pintura y varios personajes. Fue cuando dejé el azar y comencé a elaborar esta figura mitológica. Me dije…«quieres textura, te voy a dar textura»
Fui pegando pequeñas maderitas de colores encima de la piedra con una pistola de silicona, recubriéndolas con papel de periódico y cola blanca para darles cohesión, con la idea de que el DRAGÓN saliera de la superficie, bruto.
Una vez recubierta toda la silueta decidí pintarla de blanco y pinceladas rojas, como si fueran escamas, intentando darle fuerza expresiva. Parece que una de las figuras quiere alcanzarlo, otras huyen hacia la luz, hacia la ventana, con miedo, o escondidos tras una máscara. La figura que quiere abrazarlo sabe que debe persistir en su esfuerzo, siguiendo lo que le dicta su corazón e intentar domar su fuerza por mucho que le queme y sienta en algunas ocasiones muchas dudas. Es consciente que la luz del exterior le puede cegar y distraer. Su tarea consiste en dar caza a la QUIMERA, a su SUEÑO. Solamente cuando la atrape , podrá tener la independencia interior necesaria para lidiar con lo que hay afuera.
Curiosamente, a base de caerse una y otra vez, ha aprendido que la única manera de atraparla es a través del desapego.
Y la confianza.
Desapego y confianza que le llevan también en numerosas ocasiones a salir fuera de su refugio para descubrir lo que hay.
El acto creativo puede ser una liberación, pero también una condena.
zorionak alatz, oso ederra
Mila esker Jon…zorionak zuri baita ere zure lana argitaratu dizutelako. Atzo ikusi nuen eta Ibonek argitaletxearen helbidea bidali zidan…aurrera!!